Es sorprendente el volumen de artículos del sector que predicen importantes cambios en la red en 2025. Estos incluyen la incertidumbre de los aranceles y contra aranceles, así como las tendencias subyacentes hacia la deslocalización y/o la migración desde China. Esto se suma al hecho de que la cadena de suministro global ha entrado en un periodo de volatilidad implacable que incluye escasez de proveedores, presiones normativas e interrupciones impredecibles.
Los responsables de la cadena de suministro tienen la tarea de planificar el futuro, pero parece que ese «futuro» se acerca más rápidamente en 2025. Los principales aspectos que hay que planificar son:
Combinación de proveedores y diversidad geográfica
Deslocalización o deslocalización cercana cuando sea posible
Alejamiento del suministro de China
Reducir la complejidad y el riesgo general de las rutas
En este nuevo panorama, una hoja de ruta estratégica que suele consultarse anualmente o con menor frecuencia debe convertirse en un modelo vivo y dinámico. Aunque la cadena de suministro no cambie este mes, la organización tiene que saber cuándo cambian los proveedores, los puntos de origen y destino y las necesidades de los transportistas. Los métodos tradicionales de diseño de redes -basados en herramientas complicadas y frágiles- ya no son lo bastante rápidos. Para cuando las empresas finalizan la respuesta a un cambio, los datos están obsoletos y las circunstancias han cambiado.
La realidad de 2025 exige estrategias de cadena de suministro más inteligentes, rápidas y adaptables. Para los líderes de la cadena de suministro, esto significa adoptar una red de cadena de suministro continuamente optimizada que detecte los cambios, simule alternativas y se adapte en tiempo real.
Los métodos tradicionales se están quedando atrás
Durante décadas, las empresas han abordado la estrategia de la cadena de suministro mediante evaluaciones manuales a largo plazo, con un análisis programado del diseño de la red cada uno o tres años. Este enfoque tenía sentido en una época en la que las cadenas de suministro eran más predecibles.
Pero hoy, el mundo avanza más rápido hacia lo desconocido.
Tomemos, por ejemplo, la amenaza del aumento de aranceles y contra aranceles. Las normativas comerciales evolucionan constantemente, obligando a las empresas a tomar decisiones de abastecimiento y establecimiento de precios en tiempo real. Aunque los economistas están de acuerdo en que los aranceles aumentan los costos, el impacto más amplio se extiende más allá de los aumentos de precios. Cuando llegan los aranceles afectan a la viabilidad de los proveedores, a las estrategias de transporte e incluso a la demanda de los clientes, lo que obliga a las empresas a replantearse continuamente los flujos de su cadena de suministro.
La organización que pueda percibir los cambios, sincronizar modelos y explorar impactos y alternativas en el mismo día tendrá una clara ventaja sobre el competidor que tardaría uno o dos meses en modelar un nuevo entorno.
Mientras tanto, persisten los mismos retos y expectativas de los últimos años. La escasez de mano de obra, la inestabilidad política y las catástrofes naturales siguen perturbando las cadenas de suministro en todo el mundo, provocando desabastecimientos, retrasos y pérdidas de ingresos. Las emisiones mundiales de carbono y los requisitos de información sobre sostenibilidad también están remodelando las estrategias de la cadena de suministro, ya que las nuevas normativas afectan a las rutas de transporte, la selección de proveedores y las estructuras de costos.
Como solución a corto plazo a estos retos, muchas empresas están reconfigurando sus redes de proveedores para mitigar el riesgo, pasando del offshoring al nearshoring y a la subcontratación múltiple. Sin embargo, estas estrategias conllevan compensaciones de costos, nuevos retos logísticos y requisitos de cumplimiento cambiantes. Sin un modelo dinámico y continuamente optimizado, las empresas corren el riesgo de hacer cambios que introduzcan nuevas ineficiencias en lugar de resolver sus problemas.
Esta es la cruda realidad: los modelos tradicionales de planificación de la cadena de suministro no están diseñados para detectar y actualizar los datos que subyacen a estas compensaciones multidimensionales.
Los largos tiempos de los ciclos de análisis y las burdas aproximaciones de los datos están creando considerables debilidades en la cadena de suministro, entre las que se incluyen:
1. Detección lenta del impacto
Las evaluaciones tradicionales de la red pueden tardar semanas o meses en completarse. Las empresas no tienen tiempo de esperar a que se realicen recálculos manuales cuando se enfrentan a subidas de tarifas, cierres de proveedores o interrupciones repentinas del transporte. Los retrasos provocan aumentos de costos innecesarios y fallos en el servicio.
2. Retraso en el ciclo de toma de decisiones
El retraso en el ciclo analítico también incluye el tiempo que se tarda en tomar decisiones. Esto a menudo puede llevar semanas o meses si los equipos analíticos no pueden satisfacer las consultas de los ejecutivos sobre recomendaciones y alternativas. Sin la capacidad de crear escenarios dentro de una reunión de trabajo, las decisiones se retrasan. Sin la capacidad de comunicar de forma clara y cuantitativa, las interpretaciones erróneas generan más retrasos.
3. Inexactitudes e ineficiencias
Sin inteligencia de red en tiempo real, las empresas suelen pagar de más por los aranceles, asignar mal el inventario y no optimizar el transporte y la selección de proveedores. Las empresas que no optimizan continuamente sus redes suelen operar con costos y suposiciones obsoletas, lo que genera mayores gastos operativos.
La optimización continua de la red aumenta la resistencia de la cadena de suministro
Para seguir el ritmo de los rápidos cambios del panorama mundial actual, los responsables de la cadena de suministro deben adoptar un enfoque de optimización continua de la red. Esta estrategia garantiza que las empresas puedan anticiparse a las interrupciones, modelar alternativas y ajustar los flujos de la cadena de suministro en tiempo real, en lugar de tener que reaccionar cuando surgen los problemas.
A diferencia de los métodos tradicionales que se basan en modelos y suposiciones obsoletos, la optimización continua de la red aprovecha los análisis basados en IA, la automatización y los datos en tiempo real para crear una cadena de suministro que sea:
Proactiva, no reactiva. Las empresas pueden predecir riesgos -desde cambios en las tarifas hasta fallos de los proveedores- antes de que provoquen interrupciones.
Ágil y adaptable. Los flujos de suministro, transporte e inventario pueden ajustarse en función de las condiciones del mercado en tiempo real.
Optimización de costos, servicios y sostenibilidad. Las cadenas de suministro pueden equilibrar la rentabilidad y los requisitos de nivel de servicio sin comprometer el cumplimiento de la legislación.
La diferencia entre una cadena de suministro reactiva y una optimizada continuamente se reduce a la velocidad a la que se detectan, procesan y presentan a los responsables de la toma de decisiones los cambios en los datos del entorno, como la demanda, los costos o las tarifas. Si esto puede hacerse de forma autónoma (se ejecuta mientras se duerme), pueden tomarse medidas sin retrasos.
Cómo construir una red resistente con optimización continua
En Logility, ayudamos a las empresas a construir una red de cadena de suministro continuamente optimizada utilizando IA, automatización y planificación de escenarios en tiempo real.
He aquí cómo:
1. Navegar por los aranceles con la planificación dinámica de escenarios
Considere un fabricante de automóviles con sede en EE.UU. que se abastece de aluminio de Asia. Con la repentina imposición de nuevos aranceles a las materias primas, el costo de producción se dispara. No se trata sólo de un problema de precios: estos aranceles también amenazan la viabilidad de los proveedores, obligando a la empresa a reevaluar de la noche a la mañana sus contratos con ellos y su estrategia de abastecimiento.
En lugar de realizar cambios precipitados en los proveedores sin analizar implicaciones más amplias o esperar hasta el siguiente ciclo de planificación para absorber el aumento de los costos, las capacidades de optimización continua de la red de Logility pueden ayudar al fabricante a tomar medidas inmediatas, como:
Simular el impacto de los cambios arancelarios en el abastecimiento, el transporte y la fijación de precios antes de que se produzcan.
Identificar alternativas rentables en cuestión de segundos y ajustar los acuerdos con los proveedores de forma dinámica, y explorar alternativas viables y de ajuste.
Publicar los cambios de la red en las herramientas de planificación e introducirlos gradualmente con rigor cuantitativo.
2. Abastecimiento múltiple para una mayor flexibilidad de la red
Supongamos que un fabricante de electrónica de consumo depende de un único proveedor de chips semiconductores. Cuando un conflicto geopolítico inesperado detiene las exportaciones, toda la cadena de suministro se paraliza, lo que provoca costosos retrasos y acumulaciones de pedidos.
La mayoría de las empresas tendrían que luchar para encontrar un proveedor alternativo, lo que retrasaría los envíos durante meses y aumentaría los costos de abastecimiento. Sin embargo, el enfoque de optimización continua de la red permite una respuesta más optimizada, permitiendo a la empresa:
Diversificar su base de proveedores con antelación para garantizar la disponibilidad de fuentes de reserva.
Supervisar continuamente los indicadores de riesgo, como la salud financiera de los proveedores y la inestabilidad geopolítica.
Ajustar automáticamente las estrategias de abastecimiento cuando se produzcan interrupciones para evitar tiempos de inactividad.
3. Detección de riesgos y respuesta automatizadas
Supongamos que un comercio global de ropa decide trasladar parte de su producción del sudeste asiático a México y Centroamérica para acortar sus plazos de entrega. Sin embargo, sin una modelación adecuada, el traslado aumentó inesperadamente los costos logísticos y se produjeron cuellos de botella en los suministros, ya que los proveedores near-shore se esforzaron por satisfacer la demanda.
El comercio tiene que tomar una decisión, y la correcta puede elegirse aplicando herramientas de optimización continua de la red para:
Comparar el impacto de la deslocalización en los costos y los servicios
Identificar las carencias de la cadena de suministro y evaluar la preparación de los proveedores.
Optimizar el transporte y la logística para garantizar una transición rentable.
Elaborar modelos para las interrupciones previstas y planes de contingencia para las emergentes.
4. Ejecución por fases de los cambios en la cadena de suministro
Imaginemos una empresa farmacéutica europea sorprendida por una nueva exigencia de acelerar los plazos de entrega de un producto de extremo a extremo. Cada decisión en una cadena de suministro tiene un efecto dominó: cambiar de proveedor o de ruta comercial puede afectar al inventario, los pronósticos y el cumplimiento. Sin embargo, la empresa carecía de visibilidad sobre las emisiones del transporte y las calificaciones de sostenibilidad de los proveedores, lo que aumentaba el riesgo de sanciones por incumplimiento y dañaba la reputación de la marca.
Al apoyar la optimización continua de la red, las soluciones de Logility pueden ayudar a la empresa a
Alinear la planificación de la distribución, el inventario y el suministro para evitar costosas interrupciones.
Garantizar que cada ajuste de la red se coordina en todas las unidades de negocio.
Optimizar los flujos de la cadena de suministro en tiempo real, sin intervención manual
Ajustar automáticamente la selección de proveedores en función de criterios de sostenibilidad
Garantizar el cumplimiento continuo de las normativas en evolución, reduciendo sanciones y riesgos.
El impacto empresarial: Cadenas de suministro más rápidas, inteligentes y resistentes
La planificación estática de la cadena de suministro ya no es viable. A medida que se aceleran las interrupciones, los aranceles y las regulaciones, las empresas deben adoptar la optimización continua de la red para seguir siendo competitivas.
Y con las soluciones de Logility, usted también puede hacerlo, consiguiendo mejoras críticas como:
Reducción de costos del 5-20% a través de una optimización general de la red más inteligente
Aumento de la capacidad de adaptación para reaccionar de forma instantánea ante las interrupciones.
Mayor cumplimiento de la sostenibilidad con un mejor seguimiento de las emisiones
Eliminación de la demora en la toma de decisiones con información basada en IA, reduciendo las ineficiencias.
Ahora es el momento de optimizar, adaptar y liderar.
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